¿Eres amante de la cerveza?, entonces no debes perderte la ruta cervecera que proponemos en este post; donde daremos un breve paseo por los cimientos y desarrollo de esta exquisita y espumosa bebida Belga. Específicamente conocerás la prestigiosa marca Proefbrouwerij, la fábrica de los nómadas Bélgica donde puedes elaborar tu propio brebaje.
Si deseas degustar una cerveza sabrosa y de alta gama, te invitamos a probar con Proefbrouwerij, donde se elaboran productos que honran la excelencia y es parte de las estadísticas cerveceras en Bélgica, reconocido como el primer país productor de cervezas únicas, de las mejores del mundo, patrimonio Belga y de la humanidad, reconocido por la UNESCO.
El origen de Proefbrouwerij
Proefbrouwerij, como buena parte de las cerveceras flamencas, es una empresa familiar de origen Belga, nacida justamente como productora en el poblado de Hijfte, Lochristi en Flandes Oriental en 1996. Fue una iniciativa de la pareja Dirk Naudts y Saskia Waerniers. Su principal característica es que funciona alquilando sus espacios, creando cervezas a terceros, aunque también producen propias
Proefbrouwerij, además de elaborar sus ricas bebidas, adelantan importantes investigaciones y desarrollo científico relacionados con la preparación de cervezas, efectuando importantes inversiones en tecnología de punta. Sus principales clientes se componen de profesionales cerveceros, cervecerías emergentes, emprendedores o empresas asentadas en el mercado.
En Bélgica, madre de la cerveza se generan 600 tipos de esta bebida, conviven más de 1450 marcas y 160 fábricas, autoras del 1% del total de la producción global de esta rica fórmula. Una nación donde esta bebida es todo un arte y un estilo de vida de su gente.
En cuanto a la marca propia de Proefbrouwerij, recibe el nombre Reinaert, la cual incluye las cervezas: flamenca red ale (grado 9%), la ámbar (grado 7%), la tripel (grado 9%) y la grand cru (grado 9,5%).
A Proefbrouwerij se le conoce como la fábrica de los nómadas en Bélgica, o de los cerveceros gitanos, debido a que funciona como un asentamiento cervecero en alquiler, ofreciendo su infraestructura para la elaboración de cervezas a diversas cerveceras gitanas, es decir, no cuenta con infraestructuras propias o que producen cervezas experimentales en pequeños lotes.
Proefbrouwerij en la actualidad
Aunque Proefbrouwerij comparte la historia y tradición cervecera, cuya práctica se remonta a la lejana Edad Media y la precaria vida en los monasterios. En los siguientes siglos, variaron los métodos en la fabricación de la cerveza pero preservando la esencia de su receta originaria.
Su evolución se evidencia en la actualidad, incluso en los métodos artesanales valorados en el mundo como un auténtico arte. Sin perder su naturaleza originaria, Proefbrouwerij hoy día realiza esfuerzos para desarrollar y elaborar productos de alta pureza y honestidad ancestral.
Estos factores son de mucha importancia para sus clientes, proveedores, colaboradores, medio ambiente y el Estado, quienes reconocen su integridad, alto desempeño y tradición que ofrece Proefbrouwerij en sus cervezas.
Sin perder de vista los antecedente históricos que envuelven a Bélgica en la elaboración de esta bebida, la emblemática cervecera apunta hacia en el desarrollo y producción de productos bajo esquemas novedosos que aporta la tecnología, ello pese a que no promocionan o comercializamos de forma activa sus bebidas.
Su éxito como productor y facilitador a terceros se debe justamente a su integridad, centro neurálgico de Proefbrouwerij, pues garantiza que el producto elaborado y entregado no es copia de ninguna cerveza existente en el mercado, por tanto, cada bebida es única.
De este modo, la empresa tiene como norte posicionarse en el sector cervecero comercial, así como en centros de conocimiento, pues, por una parte elaboran productos, pero no se comercializan, y por la otra, llevan a cabo investigaciones científicas aplicadas para optimizarlos.
Dicha investigación actual hace parte del desarrollo de cervezas, optimización de procesos y control de calidad en su producción. Con la inversión, desarrollo e investigación (I + D + i), Proefbrouwerij garantiza a su clientela servicios basados en la ciencia, pero conservando su esencia ancestral, a fin de controlar y mejorar la calidad de las cervezas terminadas.
En este sentido, el proyecto ha efectuado una amplia investigación en Proefbrouwerij desde el 2010 del lúpulo como componente esencial en la fórmula de la cerveza. Al tiempo de crear el programa ciencia de lúpulo único, cuyo objeto es estimular el relacionamiento entre productores de lúpulo y cerveceros, para establecer parámetros de calidad representativos.
Proefbrouwerij la fábrica favorita de los cerveceros nómadas
La razón es simple, Proefbrouwerij ofrece a los cerveceros nómadas el oasis ideal para que los amantes de la cerveza artesanal lleven a cabo o desarrollen sus propios productos, o bien para empresas emergentes con poca capacidad instalada. Aunque actualmente está tomando fuerza esta modalidad de cerveceros nómadas, en términos prácticos no abundan.
Y Proefbrouwerij es pionero en su país en este formato, dado que ofrece el rincón ideal a los románticos cerveceros artesanales a menor escala. Estos buscan los medios para concretar sus sueños y desarrollar su propio brebaje, acudiendo a esta empresa, referente en el mercado global por sus altos estándares y desempeño.
Es decir, Proefbrouwerij acoge a quienes no cuentan con una infraestructura física, pero sí abundan en conocimientos e imaginación. Estos son los cerveceros nómadas que recibe la empresa. Dichos errantes viajan de casa en casa hasta dar con los resultados esperados.
La razón es sencilla, no todas las personas conocedoras cuentan con las instalaciones para elaborar sus cervezas. Siendo esta la razón del porqué muchos microempresarios y autónomos recurren a terceros. Además, muchos nómadas buscan aquellas empresas como Proefbrouwerij porque reúne y provee las condiciones que permiten desarrollar su receta.
Este mecanismo ofrece muchas ventajas a ambos actores, la primera es que permite intercambiar saberes entre los productores nómadas y Proefbrouwerij, donde todos ganan con la experiencia, al mismo tiempo, promocionan sus productos en otros mercados y la empresa receptora también se da a conocer en el mundo.
Es decir, se abre de mejor forma el ámbito comercial, dándose a conocer fuera del mercado de origen del itinerante, colocando su producto en el sector local. De tal modo que es otra de las ventajas de ser nómada, convertirse en local en cada lugar y que la cerveza alcance al consumidor en óptimas condiciones, por tanto, es una bebida sin fronteras.
¿Qué es un cervecero nómada?
El cervecero nómada es aquel arquitecto cervecero, nuevas o pequeñas cerveceras o autónomas, que elaboran sus productos en una instalación alquilada o foránea. Y qué mejor lugar para desarrollar una industria de este tipo que Bélgica, ruta cervecera por excelencia y tradición.
En este caso, los nómadas recurren a Proefbrouwerij como cervecera piloto, debidamente equipada para desarrollar y preparar cervezas para terceros, y además siguiendo un modelo marcado por la tradición, la excelencia y continuo desarrollo tecnológico.
Por lo general, el cervecero nómada elabora su cerveza en pequeña escala, e igualmente estos arquitectos cerveceros (sea una nueva o pequeña empresa, un emprendedor, etc), proporcionan a la empresa piloto su propia fórmula, aunque eventualmente, algunas cerveceras desarrollan la receta de forma conjunta.
El origen del cervecero nómada nació a medida que la preparación de esta bebida artesanal o casera fue haciéndose popular como actividad secundaria o pasatiempo. Y luego pasó de ser un pasatiempo para convertirse en una forma de negocio.
No obstante, la inversión general para elaborar cervezas con interés comercial puede ser alta, pues, requiere de una infraestructura física, ingredientes, personal y equipos, entre otros, suponen una barrera de contención para convertirse en un cervecero autónomo.
Y es justo, lo que ofrece Proefbrouwerij, un lugar seguro, confiable y reputado en la elaboración de cervezas, donde los cerveceros itinerantes acuden con sus recetas (y eventualmente los ingredientes). Allí usan toda la capacidad instalada, es decir, la fábrica, equipos y personal para dar forma a su cerveza.
